viernes. 19.04.2024

Víctor Manuel Jiménez nació en Cáceres, en 1971. Ha publicado poemas y cuentos en numerosas revistas literarias y en diferentes antologías de narrativa breve y poesía. Ha participado, con la editorial cacereña Rumorvisual, en los libros Un rato para un relato y La niña bonita. En 2011 publicó en ella su libro de cuentos Comidas para llevar. Colabora con diversos medios digitales y mantiene un blog (www.papirowebxia.com) con textos literarios y de opinión. Edita y comparte periódicamente el tríptico Letras breves. Participa en recitales poéticos y en otros eventos para la difusión de la literatura. En junio de 2012 crea la Asociación Cultural Letras Cascabeleras y coordina su revista La conserva.

¿Cuándo comenzó tu dedicación a la literatura? Creo que desde que tengo uso de razón. Siempre me ha gustado leer, algo que considero imprescindible para escribir. Me inicié con algún cuento fantástico y pequeños poemas, de esos de amor no correspondido. Guardo con cariño estas cosas en una caja de cartón, a modo de reliquias que nunca verán la luz.

¿Poesía o prosa? Me gustan los dos géneros. Cada uno tiene su espacio. Como lector (y también como escritor) poesía y prosa se entienden en esferas distintas. A veces es muy complicado ver las diferencias porque estamos en una época en el que los géneros tienden a solaparse, a fusionarse, aunque entiendo que la poesía debe conservar su lenguaje especial, ese que la caracteriza.

¿Cuál de ellas te parece que le deja más espacio al lector? Tal vez la poesía sea más propicia a que cada cual la interprete como quiera, pero en narrativa también es posible. Si nos están describiendo, por ejemplo, una casa, cada lector la imaginará, seguramente, de una forma diferente. Ahí está la magia de la literatura.

Podríamos decir que tu poesía se inscribe en la línea de las nuevas tendencias en “perfopoesía”? ¿Cómo la definirías tú? No, la perfopoesía no es una tendencia dentro de la poesía, sino una forma de hacerla llegar a la gente. Sabemos que no es sencillo que la poesía tenga lectores y me parece muy bien que se usen diversas técnicas para que el público pueda disfrutarla. En cuanto a mi poesía, diré que es complicado definirse a uno mismo. Entiendo que mi voz es una mezcla de mi interior y de las fuentes de las que bebo, de mis lecturas. Busco crear imágenes con palabras, hacer que cada poema tenga múltiples interpretaciones para el lector, intento la sencillez, pero sin dejar atrás las metáforas y el lenguaje figurado.

Dentro de la narración, parece que tu interés se decanta más hacia el relato corto, como es el caso, por ejemplo, de Comidas para llevar. ¿Te sientes más cómodo en este tipo de creación literaria? Hasta hace año y medio hubiera dicho que con el relato corto me encuentro estupendamente. Nunca tuve necesidad de hacer algo más extenso, hasta que surgió. Tengo escrita una novela. Terminé de redactarla hace unos meses y estoy con las eternas correcciones. Tanto el relato corto como la novela tienen su dificultad: en el cuento hay que narrar una historia en pocas páginas, ahorrando elementos y la novela exige trabajo disciplinado y constancia durante mucho tiempo. En cualquier caso lo importante es disfrutar con lo que se está haciendo, y también saber “sufrir”.

Muchos escritores se quejan de la dificultad para publicar sus obras. ¿Consideras que los premios literarios pueden facilitar la publicación? Los premios literarios son una buena opción para publicar obras, sobre todo en estos tiempos en los que no es sencillo sacar un proyecto a la luz. Creo que todo lo que sea dar a conocer nuevas voces es positivo para los lectores y para el panorama literario en general.

En tu caso concreto, ¿qué editoriales o qué formas de difusión has encontrado para tu poesía y tus relatos? Comencé a publicar con una pequeña editorial local, Rumorvisual, en obras corales de poesía y relatos. Mi libro de “Comidas para llevar” está publicado también por esa editorial y mi poemario “Versos del insomnio” salió con el sello de Letras Cascabeleras, nuestra Asociación cultural. Hoy en día hay formas económicas para difundir una obra, incluso sin que nos cueste un céntimo. Desde Internet a publicaciones en revistas, disponemos de varías vías para darnos a conocer.

Sabemos que en la actualidad diriges la Asociación Cultural “Letras Cascabeleras”. ¿Qué funciones estás realizando desde dicha Asociación? El término “dirigir” no me parece adecuado, prefiero decir que coordino la Asociación. Los trabajos que desarrollo son muy diversos: desde los estudios económicos y de viabilidad de los diferentes proyectos, corrección de textos, maquetación, negociación con imprentas, publicidad, presentaciones, contabilidad, gestiones, mantenimiento de la página web... como se puede comprobar hago de todo en la medida de mis posibilidades. Contando esto puedo parecer “aprendiz de mucho y maestro de nada”, pero no hay otra forma de trabajar cuando no hay intereses económicos y se pretende obtener la mejor relación calidad/precio. Cubrimos nuestras carencias, que son muchas, con entusiasmo y así vamos cumpliendo objetivos.

¿Qué proyectos literarios han surgido desde esta Asociación? Mi poemario “Versos del insomnio”fue el primer libro editado, porque entiendo que es mejor hacer los experimentos en carne propia. Después hemos sacado dos números de la revista ensamblada “La conserva” con bastante aceptación por parte del público. Y hace muy poquito hemos puesto en marcha la Colección Liquen con la novela corta “El intercambio” de Vicente Rodríguez. También convocamos un concurso literario del que saldrá una colección de narrativa y poesía. En 2014, editaremos seis libros con los ganadores del concurso. Tengo que decir que hemos recibido bastantes obras con mucha calidad. Queremos ofrecer a nuestros lectores la mejor literatura y, con el material que tenemos, creo que lo vamos a conseguir.

Algunas editoriales, como es el caso de Rumorvisual, están embarcadas en la difusión de la literatura de escritores extremeños. Nosotros, desde Sierra de Gata digital, también aportamos nuestro pequeño grano de arena. ¿Crees que las instituciones regionales deberían volcarse más en esta labor? Todo lo que sea apoyo institucional viene bien, pero ahora que no corren buenos tiempos hay que olvidarse de esto y empezar a fomentar iniciativas privadas como la nuestra. Se pueden hacer muchas cosas con imaginación y pocos medios. Lo importante es no quedarse cruzados de brazos esperando que una institución pública venga a editar nuestro libro. Estamos en un momento en el que debemos tomar las riendas.

¿Cuál es tu próximo proyecto literario? ¿Podrías adelantarnos un poco sobre él? Aunque estoy dedicado a editar, no dejo el oficio de escribir. Como he comentado antes, sigo con las correcciones de mi novela, que tardará en ver la luz bastante tiempo. Por otro lado, estoy trabajando en un poemario que escribí hacer un par de años y que ahora estoy revisando, desmontando y volviendo a montar para, tal vez, publicarlo a lo largo de 2014. Tengo en mente algunas cosas más que iré valorando.

Estamos deseando conocerlas, Víctor.

Victor Manuel Jiménez, "poesía y prosa se entienden en esferas distintas"