martes. 23.04.2024

Domené: 'La libertad es para mí, junto al amor, el bien más preciado del hombre'

Tras publicar más de 20 libros de texto e Historia, a finales del pasado año, Domingo Domené publicó su primera obra narrativa ‘CONFESIÓN GENERAL. Confieso que he amado...mal’, un libro en el que desnuda su alma y revive los momentos más importantes de su vida

Hoy entrevistamos a Domingo Domené Sánchez, historiador, escritor y colaborador habitual de www.sierradegatadigital.es. Tras publicar más de 20 libros de texto e Historia, a finales del pasado año, Domingo publicó su primera obra narrativa ‘CONFESIÓN GENERAL. Confieso que he amado...mal’, un libro en el que el autor desnuda su alma y revive los momentos más importantes de su vida

-- A diferencia de trabajos anteriores, esta es su primera obra de contenido personal, autobiográfico ¿Se trabaja igual cuando se escribe historia que cuando se escribe sobre nuestra historia?

-- Evidentemente, no. Cuando se escribe sobre un tema histórico se trata de ser objetivo; cuando se escribe sobre la propia historia lo que se pretende es reflejar las ideas, los sentimientos, la visión de las personas o las cosas desde un punto de vista puramente subjetivo. En este último caso es seguro que la percepción del autor difiere sensiblemente de quienes fueron testigos de cuanto se narra.

-- ¿Por qué el título de ésta su primera novela, ‘CONFESIÓN GENERAL. Confieso que he amado... mal’?

-- No sé si este libro se puede clasificar como novela, aunque es, ciertamente, narrativo. El título obedece a lo que el libro es: una confesión de mis pecados de desamor y como en toda confesión una súplica de perdón a quienes amé…mal.

-- ¿Qué va a encontrar el lector en su obra?

-- Además de lo antedicho podrá ver como nos formamos los de mi generación, como era la vida de un maestro rural y la de uno de ciudad, el retrato de quienes me honraron con su amistad, la experiencia de un alcalde constitucional; todo ello con bastante humor y bastante dolor.

-- ¿Cómo fue el proceso de creación de esta novela?

-- La escribí el verano pasado por necesidad, como desahogo, sin plan previo y a vuelapluma en quince o veinte días . Lo pasé muy mal escribiéndola, tan mal que fui incapaz de hacer correcciones sensibles en el original. Me causó tanto dolor, aún hoy me lo causa cuando la releo, que cuando me mandaron las pruebas de la imprenta también fui incapaz de corregirlas; por eso tiene algunas erratas.

-- ¿Cómo recuerda esos 45 años vividos en Sierra de Gata, más concretamente en Villamiel, localidad de la que fue el primer alcalde de la democracia?

-- Llegué a Villamiel por amor a quien después sería mi esposa. Viví allí los quince años más felices de mi vida que creo se describen bastante bien en el libro. Allí nacieron mis hijos y de allí incluso llegué a ser alcalde. Lo de la alcaldía –de lo que no me arrepiento-- se debió más a un intento de servir a mis convecinos que a un interés personal por la política, que aunque quienes lean el libro puedan pensar lo contrario, nunca me gustó demasiado a pesar de que tampoco pueda ocultar que me divirtió bastante por las situaciones anómalas que viví. En los treinta años que llevo fuera de Villamiel siempre he necesitado volver al pueblo periódicamente para, en cierto modo, encontrarme a mí mismo.

-- ¿Qué momento de su vida ha sido más duro de recordar?

-- Hay dos momentos muy duros. El primero, cuando a punto de cumplir los ocho años de edad falleció mi padre. El segundo, cuando hace dos años mi mujer, la persona que más he amado y sigo amando, marchó a la eternidad.

-- Por el contrario ¿cuál es, en su opinión, el recuerdo más cómico que podremos leer?

-- Momentos cómicos también hay bastantes. Destacaría algunos de mis años de juventud y otros de mi época de alcalde.

-- ¿Qué cambiaría de su vida si tuviera esa posibilidad?

-- Amar más y mejor a quienes me han amado.

-- ¿Volverá a escribir literatura creativa?

-- Seguro que sí. Es más divertida que los estudios históricos. Historiadores y periodistas nos parecemos bastante. Vosotros, los periodistas, escribís la historia del día o la semana anterior; los historiadores hacemos lo mismo de épocas más remotas. Ambos gremios tienen poco margen de libertad, se tienen que ceñir a los hechos. El narrador tiene una libertad infinita para crear o recrear personajes, ambientes, situaciones,…y la libertad es para mí, junto al amor, el bien más preciado del hombre.

-- ¿Cómo es hoy su relación con Sierra de Gata?

-- Yo soy de Sierra de Gata, aquí el ser es sinónimo de pertenecer, pertenezco a Sierra de Gata. Por mis orígenes familiares y formación me siento muy vinculado a Almería y más aún a Salamanca; pero, donde siento que estoy en la tierra que amo y entiendo, e incluso puede que me entienda, es en Sierra de Gata.

-- ¿Qué cambiaría de esta tierra?

--  Intentaría frenar la creciente despoblación y procuraría que nuestros paisanos vivieran mejor explotando los recursos naturales de la comarca mediante nuevas técnicas o aprovechamientos de algunas riquezas que hoy están abandonadas.

-- ¿Qué conservaría de Sierra de Gata como si de una joya se tratara?

-- El campo, el paisaje y los modos de ser y vivir de nuestra gente.

-- ¿Cuál será su próximo trabajo?

-- Ando liado con Alfonso IX, último rey de León. Intento hacer una novela histórica. Me siento muy unido sentimentalmente a ese rey porque coincido con él en dos aspectos para mí esenciales: el amor a Extremadura (él fue el auténtico creador de nuestra región) y el amor al amor.

-- Y hablando de amor, para finalizar ¿qué tal andas de amores?

-- Me siento pleno viviendo del recuerdo de los que tuve. Nadie sabe como puede ser el futuro, yo tampoco; pero es difícil que vuelva a unirme a una mujer, tendría que ser tan grande y generosa como las que me amaron y a las que dedico el libro; dudo mucho que eso sea posible.

Domené: 'La libertad es para mí, junto al amor, el bien más preciado del hombre'