sábado. 20.04.2024

Labores preparatorias

El huerto debe estar preparado para plantar o sembrar las hortalizas de primavera verano. Una de las características de estas plantas es que la mayoría no soportan temperaturas inferiores a 0º C porque pueden sufrir daños por las heladas tardías. Las labores del huerto dependerán del tipo de suelo y del tiempo Arado japonés o vertederaatmosférico. Si el tiempo es muy húmedo debemos esperar a que se oree y podamos entrar sin apelmazarlo por lo que es preferible que esté más bien algo seco aunque últimamente no es necesario por la sequía que padecemos. En el caso de que tenga mucha hierba, se recomienda segarla o triturarla “in situ” con la desbrozadora. Posteriormente pasamos una labor de cultivador con tractor o con vertedera pequeña (yunta de caballería o motoazada), este tipo de labor no mezcla los horizontes de suelo por ser superficial.

A continuación debemos aportar la materia orgánica para mezclarla con el suelo; si es estiércol, éste debe estar fermentado para evitar a viabilidad de miles de semillas de hierbas no deseadas. La mezcla puede hacerse con las frexadora o rotovator de la motoazada o con el tractor. aportación de materia orgánica

Esta labor debe de realizarse varios meses antes de plantar, para que la materia orgánica realice la humificación (se convierta en humus) y continúe hasta la mineralización para que pueda se asimilada por las hortalizas. La humedad favorece mucho este proceso, de hecho si el año es húmedo se acelera. A la vez que realizamos estas labores iniciamos los semilleros.

Las semillas para sembrar las hortalizas podemos obtenerlas en la tienda o también de las que hemos guardado del año anterior. Si no tenemos semillas, podemos conseguirlas de los vecinos, siempre hay algún hortelano que te pueda pasar semillas de la zona. Hasta hace poco todas las semillas eran procedentes de hortalizas de los huertos de la comarca. Como muchos ya sabéis funciona una asociación en la comarca que se dedica a recuperar las semillas tradicionales, RAMA (Red de Apoyo Mutuo Red de semilla), que realiza encuentros para intercambiar semillas e información sobre éstas. Últimamente se ha creado en España una corriente de colectivos tanto públicos como privados para recuperar las semillas tradicionales.

Siembras y semilleros

Las hortalizas podemos sembrarlas directamente en el terreno o bien sembrarlas en semilleros o eras y esperar un par de meses para que tengan el tamaño suficiente para transplantarlas al terreno definitivo. Las hortícolas que se siembran directamente en el terreno son: guisantes, rábanos, judías verdes, calabacines, pepinos, garbanzos, sandías, patatas, melones y calabazas. Salvo las patatas, las demás se siembran a golpe, es decir, se hace un hoyo y se echan tres o cinco semillas, se tapa y esperamos entre 8 y 12 días para que nazcan. El terreno debe estar seco porque si llueve y forma costra puede fallar la nascencia. Debemos tener la precaución de romper la costra a 2 o 3 cm de profundidad si el terreno es un poco arcilloso o limoso. Si sembramos muy pronto, en marzo o primeros de abril, puede que la tierra no tenga tempero, es decir, que no haya alcanzado la temperatura de germinación ya que la mayoría de estas hortalizas son típicas de verano.

Para el resto de las hortalizas es recomendable realizar semilleros entre los meses de febrero y principios de marzo. Sería para las cebollas, lechugas, puerros, tomates, pimientos, acelgas y berenjenas. El transplante lo haremos entre el 15 de abril y finales de mayo.

Para las hortícolas de otoño-invierno se hace el semillero en junio o julio. Entre las más comunes tenemos escarolas, coles, coliflor, lombarda, coles de Bruselas o brocóli. Su transplante lo haremos entre 1 de agosto y 10 de septiembre.

Algunas hortícolas tienen ciertas particularidades en la siembra como son los ajos que se siembra en diente entre octubre y enero; la habas también pero a golpe; las zanahorias que se siembra en eras o a chorrillo y cuando nacen se entresacan para que engorden; las patatas que se siembran plantando el tubérculo directamente en el surco, a unos 30 cm. de distancia, entre finales de febrero y principios de abril (en junio las tardías); las lechugas de las que podemos hacer semillero desde marzo a septiembre, para recolectarla escalonadamente.

¿Cómo hacer el semillero?

La manera tradicional de hacerlo es en el suelo y protegido con retamas. Ahora es común sustituirlas por plástico. Cuando la planta tiene el tamaño adecuado se arranca a raíz desnuda para el transplante. Hoy día los semilleros,en su mayoría, se hacen en bandejas de poliespan o polietileno con álveolos individuales; en este caso la planta se arranca con cepellón y sufre menos durante el transplante.

El transplante, es la operación de plantar desde el semillero al terreno definitivo. Como ya hemos dicho, puede hacerse a raíz desnuda o a cepellón. El terreno debe estar bien mullido y según nos convenga, podemos tener hechos los surcos o no. En la mayoría de los caso sí se hacen los surcos, con maquinaria o a mano. La planta debe regarse en el momento del transplante. Se recomienda regar sólo el hoyo individual porque si regamos el surco entero enseguida germinarán miles de semillas de hierbas no deseadas.

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