viernes. 29.03.2024

A mediados de 2011, Alfonso García Cobaleda comenzó a trabajar en Sierra de Gata con los bueyes de Kobe certificados. El proyecto para introducir estos animales en nuestro país fue una propuesta de su hermano mayor, que llevaron a la práctica el propio Alfonso y su padre, el catedrático de Derecho Civil de la Universidad Complutense, Manuel García Amigo.  Tres años más tarde esta idea, en principio “peregrina”, es una realidad y, en breve, podrán adquirirse embutidos de Wagyu ibérico de cular al peso y también en blisters de cien gramos loncheados. También podremos saborear los palitos snacks de salchichón y chorizo. “A mis hijos les encanta”, comenta divertido este vaquero del siglo XXI capaz de maridar tradición y modernidad sin que chirríe elemento alguno.

Todo en el Wagyu ibérico es novedoso en el mercado, de ahí que todo en él sea noticiable.

Su concepción misma es ya una gran noticia. La familia García Cobaleda fue la que introdujo en España este tipo de animal cuya carne es apreciadísima en los restaurantes de mayor calidad (el chuletón de 100 gramos puede llegar a costar 300 euros). Primera novedad. Este tipo de carne es muy apreciada por su sabor, textura y suavidad y, desde el punto de vista nutricional, es rica en ácidos Omega 3 y 6 y posee también componentes anticancerígenos.

No contentos con su introducción en España, esta familia serrana puso en marcha el proyecto con el que abríamos este artículo. Cruzó machos de Wagyu con vacas serranas y logró el Wagyu ibérico, con un 50% de ADN procedente de cada uno de sus progenitores. Segunda novedad.

Y tercera novedad, en breve estará en el mercado los primeros embutidos de Wagyu Ibérico, 100% vacuno. Estos productos pueden adquirirse con la misma facilidad desde en Nueva York, Abu Dabi y Santibáñez el Alto, localidad donde se ubica la finca El Campete, donde pacen y viven alegres cerca de mil cabezas de ganado. ¿Por qué? Pues porque la comercialización es on line, a través de Sibarigata.com --primera tienda on line de productos serranos-- y Sierra de Monfragüe.  Sierra de Monfragüe es, además, la productora de los embutidos gracias al acuerdo alcanzado con García Cobaleda.

Los afortunados que ya lo han probado “han quedado gratamente sorprendidos”, comenta Alfonso García. Además de sus familiares y amigos también ha probado este nuevo producto 100% extremeño el presidente regional, José Antonio Monago, quien le transmitió al empresario serrano su satisfacción tras la ingesta. “La idea es darle el toque de Extremadura respetando la forma de preparar la carne y hacer la curación”. “La diferencia está en la carne”, apostilla el padre de la criatura.

Y ahora que tan de moda está la internacionalización de las empresas extremeñas, Alfonso García Cobaleda, como siempre, va un paso por delante.  Les contamos la cuarta novedad. Los ejemplares de Wagyu ibérico son sacrificados siguiendo el rito Halal, método que permite que esta carne pueda ser saboreada por los ciudadanos de religión musulmana. Este detalle abre las puertas al mundo árabe a esta ganadería santibañeja.

Cabaña Wagyu

En estos momentos, en la finca santibañeja El Campete viven dos sementales con certificado de origen, --el primero alemán y el segundo australiano-- más  dos añojos que tuvo uno de ellos.  El año pasado 70 vacas fueron cubiertas por el semental alemán--en España solo existe media docena de ejemplares de Wagyu-- y este año ya son 200 las vacas que tienen una historia de amor con estos cuatro toros de pura raza certificada.

Los proyectos de García Cobaleda son a medio y largo plazo. Al cruce de animales --en enero y en abril-- hay que sumarle los nueve meses de gestación más los 18 meses de crianza. Así, según estas fechas “en cuatro años alcanzaremos la producción máxima de waguy ibérico” en Sierra de Gata.

Si quieres saber más y, además, de la pluma de este empresario serrano, visita su blog. http://wagyuiberico.blogspot.com.es/

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El Wagyu ibérico de Sierra de Gata llega al mercado