“La eliminación de los servicios sanitarios rurales son un paso político decidido de los populares, lo llevan haciendo 30 años en Castilla y León, ahora quieren que Extremadura siga ese modelo, pero no nos vamos a quedar callados”. Así de rotundos se han expresado los militantes de las Juventudes Socialistas de Hernán-Pérez ante lo que consideran un ataque radical al bienestar de los habitantes de nuestra localidad por el cierre del PAC de Villanueva de la Sierra, la disminución de los horarios de atención médica y la eliminación de la plaza de enfermería en el consultorio local. Desde que hace unos meses la antigua enfermera que ejercía sus funciones en Hernán-Pérez se trasladase a otra localidad, la plaza ha estado vacía y esto, según las Juventudes Socialistas de la localidad, “supone una vulneración del derecho a una sanidad pública y suficiente, independientemente del lugar en el que vivas, bien sea en Mérida o en Madroñera, en Acebo o en Plasencia, todos los extremeños tienen derecho a una sanidad digna”.
Desde que comenzara la crisis, Hernán-Pérez, como muchos otros pueblos serranos, ha acogido a nuevos habitantes que huyen de las dificultades de la ciudad ante la pérdida de trabajo o la imposibilidad de encontrarlo, jóvenes y mayores que buscan un futuro en los pueblos y que para los jóvenes socialistas necesitan unos servicios sanitarios fuertes. El aumento de la población y el éxodo urbano que está comenzando con la crisis económica hacen esto muy necesario, argumentan en un comunicado de prensa, mientras exigen tanto al PSOE como a IU un pacto de mínimos por la sanidad extremeña en las zonas rurales y urbanas, que potencie un sistema sanitario basado en la medicina preventiva, primero por motivos sociales, en segundo lugar porque eso evitará gastos sanitarios innecesarios en el futuro, haciendo sostenible el sistema. Asimismo, animan a los habitantes de todos los pueblos de la Sierra a que “defiendan sus derechos y muestren el descontento recopilando firmas, manifestándose o como consideren necesario, aseguran que esta es la única forma de conseguir que no acaben con la vida de los pueblos”.
