viernes. 19.04.2024

La Mancomunidad Integral de Municipios Sierra de Gata ha convocado la primera reunión para crear en un futuro inmediato la Mesa del Olivar de montaña. El objeto último es, según declara Alfonso Beltrán, presidente del organismo, “salvar el olivar y el principal medio de vida serrano y crear un grupo de presión capaz de hacer llegar nuestras reivindicaciones donde las decisiones se toman, ya sea en Madrid o en Bruselas”. 

En esta primera reunión, celebrada en la sede de la mancomunidad en Hoyos, han asistido representantes del sindicato UPA--UCE, de la cooperativa ACENORCA, de la Denominación de Origen Protegida Gata -- Hurdes, dos empresarios de almazaras --As Pontis y El Molino-- y los presidentes de Adisgata y AdicHurdes. 

El objeto es crear un grupo de trabajo y presión que aglutine a las sierras nortes de Extremadura, --Sierra de Gata, Las Hurdes y Trasierra/Tierras de Granadilla-- ya que ellas comparten una realidad y problemas comunes y, por tanto, unas potenciales soluciones comunes en lo que al olivar se refiere.

A la reunión también estaban convocadas las mancomunidades de municipios de Las Hurdes y Trasierra/Tierras de Granadilla-- que finalmente no asistieron.

Esta primera reunión ha sido fundamentalmente una toma de contacto entre los sectores implicados: administración, empresarios, sindicatos y grupos de desarrollo local. En la siguiente reunión, prevista para antes del verano, los participantes se han comprometido a aportar todos los datos disponibles sobre el sector olivarero de sierra, el decálogo de problemas compartidos y el camino futuro que quieren seguir.

La modificación de la PAC, que anula las particularidades que tienen los territorios de montaña y los asimila a los llanos, supone, en opinión de Alfonso Beltrán, “la desaparición del olivar, la aceituna y el aceite en la Sierra de Gata, en particular, y de los territorios de montaña, en general, ya que sólo valorará la extensión sin tener en cuenta las características propias de la agricultura de ladera”. 

La desaparición del olivar en las Sierras Nortes de Extremadura supondría también el abandono de las localidades por parte de la población y, por tanto, la desaparición misma de los pueblos.

La mancomunidad convoca la mesa del olivar de montaña