Las horas pasan y el teléfono no suena. José Iglesias y Belén Seco esperan abatidos una llamada de su hija, apenas un mensaje de texto, que les haga saber que la joven de 23 años está bien.
El sábado, día 5 de marzo, tomó un autobús en el Bar Avenida donde días antes había preguntado si sabían cuando y desde dónde salían autobuses para Barcelona. Esta es la única pista que tiene la familia sobre sus posibles intenciones.
Bárbara Belén Iglesias Seco salió de casa el sábado por la mañana y no regresó. Tras infructuosas llamadas y numerosos mensajes, su familia recibió un escueto texto telefónico en el que la joven les informaba de que “se encontraba bien y que dejaba el automóvil en la Estación de Autobuses de Cáceres”, comenta a este digital su abatida madre, Belén Seco.
Estas fueron las últimas noticias que la familia ha tenido de su hija.
“Sabemos que es mayor de edad y que no la podemos obligar a volver”, declara entre lágrimas la madre. “Solo queremos saber que está bien, sólo eso”, añade. “Es la primera vez que sale de casa sin nuestro arropo y va totalmente indocumentada”. La joven, de 23 años, ha dejado el carnet de conducir y el carnet de identidad en el domicilio familiar en Hoyos.
Las redes sociales serranas se han activado con potencia para ayudar a esta familia en su desesperación por tener noticias de su hija. Su imagen y el breve texto descriptivo que la acompaña circula por las redes con la esperanza de llegar a sus oídos.
Barbara Belén Iglesias Seco, tiene 23 años de edad, es de complexión delgada y mide 1,60. Si alguien la ha visto, por favor, que llamen de forma inmediata a los teléfonos:
659 31 00 24 o 609 32 44 64.
Barbara Belén Iglesias Seco es la mayor de dos hermanos de una conocida familia soyana que, desde el sábado, está viviendo unos terribles momentos de incertidumbre sobre el estado de salud y el paradero de su hija.
