jueves. 02.05.2024

Con las primeras lluvias del otoño aparecen en nuestros bosques las preciadas setas. Algunas son muy peligrosas, mortales, pero otras son francamente buenas y muy buscadas por los amantes de la buena gastronomía.

Cada año es mayor el número de aficionados que sale al campo a buscar este pequeño tesoro. Es un placer localizarlas, cogerlas cuidadosamente en nuestra cesta, sin arrancarlas sino cortándolas con nuestra navaja y, al mismo tiempo, disfrutar de los paisajes que las albergan y el aire puro que en ellos se respira.

La aparición de las setas depende de las condiciones meteorológicas del otoño y, sobre todo, de la cantidad de lluvias: cuanta más agua, más setas y de más variedades.

Les ofrecemos las primeras setas de la temporada para deleite de sus sentidos.

Amanita Cesarea, también conocida vulgarmente como "huevo de rey". Es una seta de color naranja en la parte superior con pintas blancas y amarilla por debajo. Esta seta se localiza en castañares, encinares y alcornocales.

Hay que tener cuidado de no confundirla con la Amanita Muscaria, cuyo consumo produce alucionaciones o incluso la muerte de quien la toma. Para saber si la amanita es Cesárea o Muscaria es necesario fijarse en su parte inferior donde la Muscaria es blanca y la Cesarea amarilla. Y ante la más mínima duda, preguntar a un experto.

RECETA. En crudo.Fileteamos muy bien el huevo de la amanita y lo disponemo en un plato llano. Añadimos sal, aceite virgen extra y un poquito de pimentón. Tras macerar unas dos horas, se convierte en un plato exquisito.

Boletus edulis, también conocido vulgarmente como "calabaza". Es una seta de color marrón por su parte superior y blanquecina en su parte inferior. Se encuentra en los mismos hábitats que la amanita cesarea.

RECETA Crema de boletus. Realizamos un sofrito con un poco de puerro, cebolla y ajo. Una vez sofrito, añadimos el boletus troceado y ponemos un poco de mantequilla, nata y leche. Dejamos cocer y ya tenemos la crema de boletus.

Macrolepiota procera, también conocida como "parasol". Es una seta de color blanco con pintas marrones. Su sombrero es muy ancho, entre 15 y 25 centímetros y es una seta que puede confundirse con las lepiotas por el color y la forma. Tenga en cuenta el aficionado que hay lepiotas mortales. Por ello, es fundamental no coger ninguna lepiota que tenga un sombrero menor a los ocho centímetros. Y siempre, de nuevo, ante la duda consultar con un experto.

Las macrolepiotas nacen en dehesas y cualquier otro lugar donde haya o paste ganado.

RECETA: Troceamos en cuatro cuartos la macrolepiota. La empanamos con huevo y pan y la tomamos como si de un escalope o san jacobo se tratara.

Agrocybe Cilindrica o "seta de chopo". Esta seta tiene un sombrero de color marrón y blanco por su parte inferior, nace en racimos en los troncos de los chopos muertos. Es inconfundible. Se encuentra en alamedas o choperas.

RECETA. Cortamos unos ajos y los sofreímos. Una vez tenemos el sofrito, ponemos la seta, un poquito de jamón troceado y huevos. Para los amantes del picante, puede añadirse una cayena o pimienta. Con todo ello haremos un revuelto delicioso.

Lactarius deliciosus también conocido como níscalo. Seta de color naranja toda ella cuyo hábitat son los pinares.

RECETA. En vinagre. Se trocean en porciones pequeñas y se echan en frascos con agua, vinagre, unos granos de pimienta y unos dientes de ajo. Los dejamos una semana y tras siete días tendremos unos deliciosos níscalos en vinagreta, ideal para el aperitivo.

Las lluvias traen las primeras setas de la temporada