Cuando pocos días quedan para celebrar el primer y luctuoso aniversario del gran incendio del pasado año, que arrasó cerca de 8.000 hectáreas en el valle Rivera de Acebo, fundamentalmente, Acebo vuelve a protagonizar la actualidad de Sierra de Gata debido a las llamas.
A las tres y media de la tarde un conato de incendio hacía saltar las alarmas en Hoyos. Hasta el lugar, se desplazaron los retenes de tierra G55 y G57 y G52. El conato se produjo, según las primeras informaciones próximo a la Virgen de la Peña, donde confluyen los términos municipales de Hoyos, Cilleros y Perales del Puerto.
Este primer foco fue sofocado en apenas cuarenta minutos de intenso y efectivo trabajo.
Tres horas más tarde, un nuevo foco era declarado pero esta vez en el término municipal de Acebo. Según las primeras informaciones no oficiales, las llamas se iniciaban en el paraje de La Osa, próximo al mismo lugar donde el 6 de agosto de 2015 se inició el gran fuego que arrasó cerca de 8000 hectáreas en siete municipios serranos, fundamentalmente en Acebo, Hoyos y Perales del Puerto, aunque también afectó a los términos municipales de Gata, Villasbuenas de Gata, Villamiel, Moraleja y Cilleros.
Hasta Acebo, poco antes de las siete de la tarde se desplazaba la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), con base en Pinofranqueado y el retén helitransportado Águila 4.
Si bien la zona ya había sido arrasada el pasado verano, los altos y espesos pastos y las fuertes rachas de viento aumentaban la peligrosidad del foco. Cuatro horas más tarde, cerca de las once de la noche, un nuevo foco prendía en el término municipal acebano, esta vez en el paraje conocido como San Juan. En este paraje ardían a medianoche tres focos diferentes. Hasta el lugar del incendio se desplazaron los medios del SEPEI, dependientes de la Diputación de Cáceres, con base de operaciones en Gata y el retén de Hoyos.
A la una de la madrugada estaban en el lugar del incendio los retenes de tierra G55, G57, G61 y el retén del SEPEI. De los tres focos declarados en la zona alrededor de las siete de la tarde, a esta hora sólo permanecía activo uno de ellos cuyas labores de extinción se complicaron debido al fuerte viento y que, finalmente, también ha podido ser controlado.
La alerta permanente en la que viven los vecinos de la Sierra tras el incendio del pasado año provocó que las redes sociales se incendiaran con las primera noticias y llegara a cundir el pánico, sobre todo entre los vecinos cuyas residencias y terrenos se encuentran próximos al lugar del incendio.
Esta información no es oficial.
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