Como cada semana desde hace nueve, los trabajadores públicos serranos viven un nuevo Viernes de Negro para protestar por lo que ellos consideran “el desmantelamiento de la sociedad de derecho” y “la demonización del funcionario”, acusandoles, a veces sibilinamente y otra veces con trazo grueso de ser los causantes de la crisis actual.
Esta es la octava ocasión en la que los trabajadores públicos se concentran a las puertas del trabajo pero, a diferencia de las anteriores, la cita será a las doce “para facilitar la afluencia de compañeros”, señalan desde la organización.
Viene siendo habitual que una veintena de trabajadores se concentren cada viernes vestidos de negro --salvo los que utilizan uniforme, claro está-- a las puertas de la sede de la Mancomunidad de Municipios Sierra de Gata. Los trabajadores pertenecen al propio organismo mancomunado, el plan infoex, al grupo de acción local Adisgata o los trabajadores del ayuntamiento de la localidad. Más de un viernes se ha podido ver en la imagen el apoyo presencial del alcalde 
de la localidad, Marcelo Hernández, o Aurelio García, vecino de Hoyos y presidente de la Red Nacional de Desarrollo Rural y su homóloga extremeña.
Desde el pasado viernes hasta hoy, entre dos viernes de luto, el día 15, en Madrid se celebró la manifestación convocada por los sindicatos y diversos
colectivos sociales contra los recortes del gobierno. Entre las 65.000 personas que acudieron a la manifestación de Madrid, se pudo ver a muchos serranos protestar contra lo que la gran mayoría de ciudadanos considera una “transformación perversa del actual estado del bienestar”.
El primer Viernes de Negro que los trabajadores públicos celebraron en Sierra de Gata el día 13 de julio de este año. Esta medida de protesta, por un lado, y de concienciación ciudadana, por otro, es una acción global que se está llevando a cabo en numerosas ciudades de España.
