sábado. 18.05.2024

El cielo de Sierra de Gata

El Sol ya no estaba. Cenábamos con unos amigos en Villasbuenas de Gata, mientras el cielo parecía girar lentamente en el sentido contrario al de las agujas de un reloj.

El Sol ya no estaba.

Cenábamos con unos amigos en Villasbuenas de Gata, mientras el cielo parecía girar lentamente en el sentido contrario al de las agujas de un reloj.

Eran casi las 10 de la noche de un día de abril avanzado, y el amigo que miraba hacia Santibáñez el Alto exclamó de repente: "¿Qué estrella es aquella rojiza que allí arriba se ve?" (un poco hacia la derecha de Santibáñez, es decir, más al sur, y a unos 50 o 60 grados sobre el horizonte). "No es una estrella, es un planeta. Es Marte, asociado en la antigüedad al dios de la guerra y al hierro metálico, cuyos compuestos le dan su color rojizo. Su símbolo, un círculo con una punta de lanza en su parte superior, lo usamos todavía para representar lo masculino."

Los planetas viajan por los cielos más o menos por el camino aparente del Sol ( la "eclíptica", la línea en la que ocurren los eclipses) y moviéndose durante el día de este a oeste. Unos son visibles de noche y otros sólo al atardecer o al anochecer.

Como Marte tarda casi el doble que la Tierra en dar una vuelta alrededor del Sol, está situado en el cielo unos dos meses en el mismo lugar que cada una de las 12 constelaciones del Zodíaco. Ahora se encuentra en Leo, cuya estrella más brillante se puede ver cerca de Marte, un poquito más arriba y hacia la derecha, al final de una especie de hoz, que representa la cabeza del León: "Regulus", diminutivo de "Rex" (rey), porque creían que regía los asuntos de los cielos.

"¿Y dónde está Venus?", preguntó el amigo.

En la radio  Paul McCartney cantaba "Venus and Mars are alright tonight".

Y esa ya es otra historia...

El cielo de Sierra de Gata